Explosión de sonrisas

>> martes, 30 de septiembre de 2008



Tengo miedo de olvidarme del despertar

cuando se propaga la tímida noche,

mas la señal en esta orilla del día

con aquel cielo encapotado,

tanto,

que uno podría levantar la mano y alcanzarlo,

me dice con resentido respeto

que la sombra del contorno de mi pena

no es tal,

es falsa mentira.

Créeme que sólo es ceremonia, amigo.

Ando en el gremio de la alegría,

trazo y esparzo arrebatos de sonrisas,

cordial truhán de revueltas,

mutismo en mares de lágrimas,

cauteloso en palabras

pero resurgido del fondo de cualquier fisura.

Fue el azar

el que troceó las turbias lágrimas

junto al humedecido mausoleo.

Yo, te dejo mi risa,

mi aplauso, mi fortuna.



Read more...

Noches de insomnio

>> domingo, 28 de septiembre de 2008

Estoy solo en esta negra oscuridad,

dándole vueltas a tu persona en mi cabeza,

mientras sufro otra noche de insomnio,

otra noche blanca y espesa.

Luz radiante cuando te veo

y luego oscuridad cuando desapareces ante mí.

El sol divertido y fugaz

en cada uno de los rincones del cielo,

seguido después

de la más negra de las noches,

el silencio de las estrellas,

el viento que agita mis pensamientos

y me indica que regresas

para verte,

para sentirte,

para sufrir otra noche de insomnio.

Mis palabras resbalaron sobre ti,

como lo hicieron las hojas muertas de los árboles,

en el mismo instante que te hablé.

Y ahora no te hablo,

no me hablas.

Silencio.

Me miras con esos ojos sin lustre,

con esa impermeabilidad en palabras.




Read more...

Si supieras campesino

>> jueves, 25 de septiembre de 2008

Si supieras campesino
que de ti nace la hierba
y por ti vive mi vida,
por los callos de tus manos
que sembraron las semillas.
Si supieras campesino,
anónimo personaje,
que esos dolores de tu espalda
son maná para la boca,
y no te pagan merecido
ese sudor que va empapando
tu camisa,
y va calando esa tierra,
campesino que tu mojas.
Y en los días de sequía
tú más riegas inquietudes,
sol que abrasa, quema y duele,
esas sombras de los frutos.
Ay campesino si supieras
lo que nace de los callos de tu mano.


Read more...

Llama, ceniza y renacer

>> martes, 23 de septiembre de 2008


Muere la llama
que prendió errores y tristezas,
renace entre cenizas y ascuas
la ilusión de lo venidero,
el ansia de lo extraño,
desconocido,
el aire nuevo al respirar
que antes por ti respiraron.
Y trepo
por escaleras sin escalones,
por pendientes antes empinadas
que ahora se me antojan toboganes.


Read more...

Dos estrellas

>> viernes, 19 de septiembre de 2008


Al amanecer quedaban

solamente dos estrellas.

La noche fue dura,

la batalla sangrienta.

Hieren las estrellas con sus puntas

a los corazones buenos

que invaden mis sueños,

y desconfían de rufianes

que enternecen mi alma,

y mi noche se oscurece

al morir la estrella en esta guerra,

que me salva

y me hiere,

y me quiere,

y me daña.

No es mi guerra y yo no muero,

son mis ojos cerrados los ciegos,

abiertos para nada

lloran por los muertos,

que ni tuve ni abracé,

de esta noche que termina,

cuando quedan dos estrellas.




Read more...

El olor de unas sábanas manchadas

>> domingo, 14 de septiembre de 2008


Compro,

sinfín de momentos perdidos en ausencias,

gangas de cuatreros que me vendan lo invendible.

Y hoy quiero

un camastro donde apresarte,

copular como un devoto

en la jerarquía patentada del amor.

No obstruyas

los silencios en rincones accesibles,

y las oscuras esquinas de ciudades

donde poder tocarte.

Erguido ante ti quedo,

exaltado trovador, sediento de tu cuerpo,

ufano al predicar lo que por ti siento

alcahuete entre la gente

con tal de amarte, amante,

de tenerte.

Imputado quedé por no abrazarte,

besos sin sabor,

escándalo público al gritar tu nombre entre ladrones.

Hoy, desnudo quedo,

sin tenerte,

sin amarte, amante,

mi camastro vacío,

recordando el olor de las sábanas manchadas.






Read more...

Me rezuman sonrisas

>> martes, 9 de septiembre de 2008


Me rezuman sonrisas
si miro su tímida cara,
expectante,
ojos pequeños que no se atreven a mirar.
Son los juegos inocentes
de esos niños ya adultos
temerosos de romper un encanto
que nace y muere en el mismo instante,
sin palabras,
sólo miradas,
sonrisas equivocadas pero aduladoras.
Me rezuman caricias
que no podrán llegar a producirse,
cuando evita y te empuja,
nariz chata,
pequeña,
en cara redonda
con ojos perdidos entre cristales de lentes.
Rezuman sonrisas en mis labios
cuando rememoro nuestro encuentro,
que ya fue
y terminó.

Read more...

No podré dejarte en una noche de pesadilla

>> martes, 2 de septiembre de 2008

Era el rechinar de los dientes
el que me advirtió de tu miedo,
de la sensación fría de tu cuerpo
como si de hielo se tratara.

Asiste mi mano con fuerza,
tensa,
como si pensaras que sucumbías al vacío.
Te abracé fuerte,
secando con mi cuerpo el sudor frío,
respirando cerca de tu rostro,
para que me sintieras a tu lado.

Te susurraba.

Descansa y no pienses,
nunca pude dejarte,
duerme,
duerme,
estaré siempre cerca.


Tu mano se fue destensando,
y tu cuerpo
quedó tranquilo.
Dormías nuevamente,
y yo
miraba mientras te velaba.

Descansa y no pienses,
nunca pude dejarte,
duerme,
duerme,
estaré siempre cerca.



No podré dejarte en una noche de pesadilla.

Read more...

  © Blogger templates Shiny by Ourblogtemplates.com 2008

Back to TOP