Concepción Jerónima
>> lunes, 9 de marzo de 2009
Me esperaba Madrid expectante
entre los arcos más céntricos de la ciudad
y rodeado de paradas de autobús.
¡Ay Madrid! que me llamaste
a buscar entre sábanas,
después de diecisiete horas de amor
el compartir tu nombre en conversaciones
y portadas del resto de mis días.
Ciudad sin dueño,
nacida en mí por Concepción Jerónima.
No recuerdo si acaso aquellos inviernos
se convirtieron en agradables primaveras,
no sé si la música que me envolvía
tal vez llegaba de los puestos que cobijaban.
Allí quedé por temporadas
para robarte finalmente un dedo de la mano,
y que te llorasen nostalgias
en un mar de desconocidos desconsuelos.
10 comentarios amigos:
Mi querido MARIO:
Comparto en gran medida tu comentario, tus versos, tu poema. Mi experiencia personal tiene mucho que ver con lo que narras. Sin embargo, yo nunca podría haberlo escrito tan bien, tan hermosa, ni tan conmovedoramente.
Te quiero. DIOS te bendiga
ANTONIO
Qué desesperanza hay en este texto.
Y algo de saudade.
Y mucho de vacío.
Saludos
José Roberto Coppola
Algunos te esperamos como Madrid.
¿Dónde te has metido, Mariete?
Esperemos que vengan nuevas temporadas y te tengamos más a mano!
Besos!
¡Ay Madrid!
Acabo de regresar
y ya estoy deseando volver.
Bien vale aquel dicho popular
"de Madrid al cielo".
Un abrazo
Un placer el que hayas podido regalarme este precioso texto.
Mil gracias.
Profunda melancolía me ha dado al leer tan precioso poema,como echo de menos Madrid!
aY, CARI que mono, poetizando tus recuerdos de madrid... Eso está por alli por el Mnisterio de Asuntos Exteriores, no? Asi bajando a la Plaza mayor, donde paran unos buses que vienen de Villaverde, creo...
17 horas de amor seguidas? NO me extraña que hagas poesía, cari... jajaja
Bezos
A veces halagamos a una ciudad haciéndola responsable de nuestros recuerdos de otrora, sin darnos cuenta de que somos nosotros quienes los hicimos posibles. Los momentos de jubilosa juventud embellecen hasta la más sórdida cuadra. :-)
Especialmente motivador saber que hay huellas tuyas en mi ciudad.
Precioso.
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